24 sept 2012

La maldición del brócoli



El brócoli tiene unas propiedades nutritivas y antioxidantes excelentes, no se puede negar. Se puede  cocinar de diversas formas porque combina muy bien con cualquier tipo de alimento, hay multitud de recetas que lo confirman. Como su cultivo no requiere condiciones especiales para su producción, se podría decir que es un vegetal más que rentable para nuestro bolsillo y nuestra salud.
Aún con esta carta de presentación de premio nobel de las verduras, lo odio con toda mi alma. No soporto su olor, fresco o cocinado, ni su textura, al tacto o paladar, ni su forma de bonsai bastardo. Desde la infancia me ha perseguido buscando hacerse un hueco en mi alimentación. Siempre le he dado la espalda, pero no ha desistido.
Mi madre fracasó camuflándolo en forma de puré, me saltaba la alarma en la primera cucharada.  En los restaurantes, lo pueden servir como guarnición,  pero sería más propio llamarlo “guarrición”. Tarde o temprano, de una forma u otra, cuando consigo olvidarlo, reaparece en un plato.
Lo peor de todo esto es que mi mujer es vegetariana y  amante de este  vegetal del diablo. Por eso, quiero hacer pública mi rendición absoluta. Hay cosas contra las que no se puede luchar y ésta es una de ellas. Lo que ha unido Dios que no lo separe el brócoli.

1 comentario:

  1. TRAS LAS VACACIONES EN ROMA Y BARBATE , CON SU CORRESPONDIENTE SOBREDOSIS DE ATUN EN VENA , EL BICHITO SE MIRO EN EL ESPEJO Y DE PRONTO UN DIA, CON SU CARITA ANGELICAL , ME DIJO: " A PARTIR DE MAÑANA ESTAMOS A DIETA". DESDE ESE GLORIOSO DIA NO ENCUENTRO EL MOMENTO DE ATACARLA CON EL BROCOLI...

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